Introducción a los desviadores
Aunque su funcionamiento no es difícil de entender, un desviador parece un componente sofisticado. En definitiva, el desviador de una bicicleta nos permite cambiar la dificultad de pedaleo en cualquier momento durante el recorrido. Con él, podemos acelerar rápidamente en terreno llano o reducir fácilmente el esfuerzo de pedaleo en pendientes. El desviador consigue esto moviendo la cadena en varias marchas, modificando así la velocidad de la rueda y la distribución de la potencia. Esta disposición no solo aumenta el placer de conducción, sino que también ayuda a la bicicleta a sortear diferentes terrenos.
Los desviadores no se encuentran en todas las bicicletas, especialmente en las de una sola velocidad. Pero si tienes una bicicleta con desviador, verás claramente su eficiencia y simplicidad. Especialmente para recorridos de larga distancia o fuera de carretera, la adición de un desviador casi cambia la experiencia de ciclismo, ya que el cambio flexible permite a los ciclistas afrontar fácilmente varios terrenos. Diferentes combinaciones de marchas satisfacen diversos requisitos de conducción, por lo que el desviador es un componente esencial de las bicicletas contemporáneas.
Tipos de descarriladores
Los desviadores de bicicleta adoptan varias formas. Generalmente, se dividen en desviadores delanteros y traseros según la posición de montaje y el tipo de control; los desviadores cumplen una función particular en el mecanismo de cambio. El desviador delantero, que se encuentra cerca de los pedales, mueve la cadena principalmente en los platos delanteros. En pocas palabras, el desviador delantero influye directamente en la resistencia del pedaleo al permitir que los ciclistas cambien entre platos más grandes y más pequeños. Esta función es muy útil en terrenos variados; por ejemplo, pedalear es más fácil cuando se cambia a un plato más pequeño al subir, mientras que un plato más grande en terreno llano o cuesta abajo aumenta la velocidad.
El desviador trasero, que se encuentra en la parte trasera de la bicicleta, regula el movimiento de la cadena a lo largo del cassette trasero. El cassette trasero, que suele tener muchos engranajes, desde grandes a pequeños, ofrece a los ciclistas opciones de cambio más precisas. El ritmo de conducción se mantiene en gran parte gracias al desviador trasero. Los ciclistas pueden ajustar la dificultad del pedaleo variando los engranajes traseros, lo que les permite identificar la combinación de engranajes ideal para ahorrar energía y ahorrar dinero.
Existen varios tipos de sistemas de cambio que se adaptan a diferentes situaciones. Las bicicletas de una sola velocidad son perfectas para los desplazamientos diarios y los paseos urbanos, ya que son sencillas y fáciles de manejar sin procesos de cambio sofisticados. En montaña, carretera y bicicletas de gravaSin embargo, los sistemas de varias velocidades son estándar y permiten a los ciclistas sortear diferentes terrenos difíciles y proporcionar ascensos, aceleraciones y desaceleraciones suaves. Además, gracias a los avances tecnológicos, los sistemas de cambio electrónico han encontrado su camino en el mercado. Estos sistemas brindan importantes beneficios en contextos competitivos, ya que ofrecen cambios más rápidos y precisos mediante controles eléctricos. Al hacer que la conducción sea menos difícil y minimizar los errores de cambio manual, los botones electrónicos simples se están volviendo cada vez más populares entre los ciclistas de élite.
Cómo funcionan los desviadores
Es fascinante saber cómo un desviador nos permite cambiar de velocidad y sortear distintos terrenos durante el recorrido. Imagina pedalear cuesta arriba y descubrir que cada vez resulta más difícil. Un simple movimiento de la palanca de cambios hace que el desviador mueva la cadena a una marcha menor, lo que reduce la resistencia y hace que andar en bicicleta sea mucho más fácil. En cambio, en terreno llano, el desviador transfiere la cadena a una marcha mayor, de modo que cada pedalada hace avanzar la bicicleta más.
Este sistema, que incluye la palanca de cambios, el cable, la polea y la cadena (cada uno con una función específica), depende de un conjunto coordinado de piezas. El cable tira o se suelta una vez que se activa la palanca de cambios, regulando así el movimiento de la polea y, por lo tanto, la posición de la cadena. La tensión exacta del cable envía la señal desde la palanca de cambios a los componentes del desviador trasero, garantizando así un movimiento firme de la cadena hasta la siguiente marcha. Aunque cada cambio parece sencillo, un diseño y una calibración cuidadosos (especialmente en bicicletas profesionales, donde la atención a los detalles es fundamental) respaldaron cada uno de ellos.
El cambio de marchas no solo requiere precisión, sino también fluidez. Cualquier demora o vacilación puede alterar el ritmo del ciclista, lo que puede provocar una pérdida de velocidad en cuestas pronunciadas o en marchas rápidas. Muchos descarriladores de alta gama están especialmente ajustados y otros tienen controles electrónicos que mejoran la sensibilidad y la economía de los cambios. Imagínese correr y pulsar un botón para obtener una respuesta instantánea del descarrilador: esta fluidez es bastante útil para mejorar la experiencia de conducción.
Por lo tanto, el diseño del desviador aumenta el disfrute y el control, además de la facilidad de conducción. Cada acción de cambio fortalece la relación entre el ciclista y la bicicleta. Los recorridos todoterreno y de larga distancia dependen en gran medida de esta adaptabilidad para permitir a los ciclistas lograr una combinación de velocidad, potencia y agilidad.
Componentes clave de un descarrilador
El funcionamiento eficaz de un desviador depende de la cooperación entre sus componentes. Los componentes principales, que incluyen el cambio, el cable, la polea y la cadena, crean una "red de transmisión" sofisticada. Aunque cada componente cumple una función diferente, todos deben funcionar en perfecta sintonía para crear cambios fluidos. El cambio, que actúa como comandante del sistema, envía órdenes al cable, que afecta inmediatamente al movimiento de la polea mediante cambios de tensión. La ubicación de la polea decide finalmente dónde se asienta la cadena en los engranajes, lo que permite a los ciclistas cambiar de marcha cuando lo deseen. Esta interacción garantiza respuestas rápidas y precisas del sistema al incluir no solo estructuras físicas, sino también ingeniería y calibración precisas.
Aunque parezca pequeño, el cable es absolutamente vital en el sistema de cambio, ya que sirve como "transmisor" de las órdenes del cambio a las partes importantes del cambio. Su tensión influye directamente en la precisión del cambio; cualquier pequeño cambio en la tensión influye en los movimientos finos de la polea, por lo que el material y el diseño del cable son absolutamente importantes. Compuestos generalmente por materiales resistentes a la oxidación y de alta resistencia, los cables de primera calidad garantizan un buen estado en cualquier clima, especialmente para el ciclismo todoterreno al aire libre, donde deben resistir el barro, la humedad y los golpes.
La polea, que actúa como "guía", garantiza un cambio de marchas sin problemas para la cadena. Muchas veces, el diseño de la polea consta de cojinetes de precisión, lo que reduce la fricción durante el funcionamiento. Es esencial en el desviador trasero, ya que modula gradualmente la tensión de la cadena para mantener la estabilidad. Para evitar que la cadena se deslice o salte durante los recorridos, esto requiere una cooperación precisa con otras partes. Además, son cruciales el material y la mano de obra de la polea; los desviadores de alta gama utilizan materiales livianos y robustos que no agregan peso ni resisten la fricción de la rotación rápida.
La cadena, que transmite directamente la fuerza de pedaleo a las ruedas, funciona como el "ejecutor" de todo el mecanismo de cambio. La velocidad de las ruedas y la resistencia al pedaleo cambian en función de cada movimiento de la cadena entre las marchas. Una buena cadena debe ser resistente al desgaste y capaz de gestionar cambios de marcha regulares, garantizando así un paseo agradable. Ya sea en el ciclismo diario o en una carrera intensa, cada cambio de cadena captura el pulso del sistema, lo que favorece la velocidad y la potencia del ciclista.
Mantenimiento del desviador
Si bien es necesario un mantenimiento frecuente para que los descarriladores sigan funcionando a lo largo del tiempo, estos mejoran la experiencia de conducción. Especialmente en recorridos al aire libre o en condiciones cambiantes, muchas de las pequeñas piezas del sistema de descarrilador (cables, cadenas, poleas) pueden acumular polvo, suciedad y aceite. Esta acumulación puede provocar cambios lentos o desalineaciones. El mantenimiento regular, que incluye la lubricación y la limpieza de estos componentes, garantiza una conducción suave y con capacidad de respuesta y aumenta su vida útil.
Aunque no es difícil, el proceso de limpieza requiere mucha atención a los detalles. La cadena debe limpiarse suavemente por ambos lados con un limpiador de cadenas y un cepillo para eliminar la suciedad más resistente, ya que engrana exactamente con los engranajes. La lubricación posterior mantiene la cadena funcionando a altas velocidades en perfectas condiciones. Además, debe limpiarse la polea, ya que determina el recorrido de la cadena en los engranajes. Las comprobaciones y la limpieza periódicas ayudan a evitar que la cadena patine o se desalinee como resultado de la suciedad o la arenilla en la polea.
El mantenimiento y ajuste de la tensión del cable también son bastante cruciales. La sensibilidad del desviador está determinada por la tensión del cable; cualquier holgura o exceso de tensión puede provocar cambios imprecisos o incluso fallos. Aprender a controlar la tensión del cable ayudará a los ciclistas a realizar los cambios necesarios en caso de que la reacción del cambio se retrase o sea errática. La lubricación regular del cable reduce la fricción, mejorando así la sensación del cambio.
En los paseos al aire libre, una rápida comprobación del desviador antes de la salida ahorra tiempo y esfuerzo. El mantenimiento del funcionamiento del desviador depende fundamentalmente de un mantenimiento profundo y regular o del reemplazo de los componentes desgastados para los aficionados al ciclismo intenso. Si nos centramos en estos aspectos del mantenimiento, los desviadores funcionarán de forma óptima y no tendremos que preocuparnos en ningún momento de la salida.
Marcas de desviadores más comunes y consejos para su selección
Aunque la elección de marca y modelo de un desviador puede resultar confusa, varias marcas tienen cualidades especiales. Los líderes en sus campos, Shimano, SRAM y Campagnolo, tienen sistemas de desviadores que van desde el nivel de entrada hasta el nivel profesional. Cada marca cuenta con tecnologías y filosofías de diseño únicas. Reconocidos por su durabilidad y cambios sin problemas, los desviadores Shimano se adaptan a muchos entornos de conducción. Los ciclistas de montaña y gravel prefieren un diseño liviano con una gran respuesta de velocidad y precisión, que SRAM enfatiza. Campagnolo es particularmente apreciado en el ciclismo de ruta, que se distingue por su mano de obra y su estilo clásico italiano.
El cambio correcto depende tanto de los requisitos de la bicicleta como de la marca. Un cambio Shimano sencillo y de nivel básico satisfará las necesidades diarias con estabilidad y bajo mantenimiento para la conducción urbana en pistas únicas o carreteras llanas. Los cambios ligeros y robustos de SRAM son perfectos para los aficionados al ciclismo de montaña o todoterreno. Especialmente en el ciclismo de larga distancia o de carretera, los ciclistas que buscan velocidad y rendimiento pueden optar por cambios multivelocidad de gama alta como la línea premium de Campagnolo, que destaca por su sensibilidad y suavidad en los cambios.
Además, el presupuesto también influye en la experiencia de conducción. Aunque tienen un precio razonable, los cambios de gama básica pueden carecer de la durabilidad y suavidad de los modelos premium. Aunque son más costosos, los cambios de gama alta proporcionan una mejor estabilidad y rendimiento durante un uso prolongado. Por ejemplo, aunque los cambios electrónicos son caros, su tiempo de respuesta y precisión se adaptan a los consumidores con altas exigencias de ciclismo, especialmente en competiciones. Elegir un cambio que se ajuste a las necesidades y al presupuesto mejorará la comodidad de conducción.
Conclusión
Como parte vital de las bicicletas, los desviadores mejoran la flexibilidad y ofrecen diversas experiencias de conducción. Desde la selección del tipo y la comprensión de los principios de funcionamiento hasta el mantenimiento de los componentes, cada detalle del desviador afecta a la fluidez y la comodidad de la conducción. Las diferentes marcas y grados de desviadores brindan ventajas únicas, que satisfacen una variedad de necesidades, desde los desplazamientos diarios hasta las carreras profesionales. Al realizar el mantenimiento y la revisión periódica de los desviadores, los ciclistas pueden garantizar un rendimiento óptimo para una conducción más suave. Ya sea para principiantes o ciclistas experimentados, comprender y dominar las técnicas del desviador hace que la conducción sea más agradable y eficiente.